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Evaluación psicopedagógica

¿Qué es la evaluación psicopedagógica?

Una evaluación neuropsicopedagógica permite examinar parámetros indicadores de inmadurez como la presencia de reflejos primitivos sin integrar o lateralidades sin definir, marcadores de problemas en el procesamiento auditivo y habilidades de percepción visual deficientes, teniendo en cuenta, además, el estilo de procesamiento de los alumnos/as, su autoestima y la sintomatología que presentan.

Aspectos que contempla la evaluación e intervención psicopedagógica para posibilitar e incentivar el potencial de la persona:

  • Desarrollo físico y funcional
  • Sistema familiar y escolar y las relaciones que la persona mantiene en dichos sistemas
  • Percepción e integración sensorial
  • La motivación
  • El rendimiento y la expresión
  • Situación emocional

Objetivo: llegar a la raíz del problema

El objetivo es atender a la etiología y tratar desde las causas. Los síntomas que maestros/as, madres/padres y alumnos/as identifican, pueden ser la punta del iceberg, por lo que exige la realización de una evaluación neuropsicopedagógica amplia de las habilidades de cada alumno/a, una evaluación de sus «rutas de entrada», motoras, táctiles, visuales y auditivas; de las habilidades de «procesamiento» y de las «rutas de salida», incluyendo pruebas de atención, memoria, estado emocional y desórdenes y vínculos sistémicos, como complemento a las pruebas de evaluación y rendimiento escolar. Cuando hay un atasco, las causas pueden ser muy diversas. Se trata de que en cada caso podamos llegar a la raíz del problema, todo aquello que no vemos a simple vista. Una mirada amplia que incluye todos los aspectos puede ayudar a encontrar los pasos a dar con mucha más claridad.

Valoraciones personalizadas

En cada caso habrá que valorar la necesidad de realizar una evaluación completa, o según los síntomas, priorizar algunos aspectos frente a otros, haciendo valoraciones más reducidas y prioritarias.
Según la valoración se plantearán diferentes intervenciones, unas que requerirán derivaciones a otros profesionales (optometristas, psicomotricistas, profesionales que trabajan la integración sensorial, logopedas, osteópatas, terapeutas sacro-craneales), y otras intervenciones que realizaré yo, como el Sistema de Estimulación NeuroAuditivo (SENA), y acompañamiento a niños/as y sus familias, ayudando a comprender mejor lo que la niña o el niño están expresando y necesitando, para que cada niño/a y familia puedan reajustar posibles desequilibrios y desórdenes en el sistema familiar, basándome en la mirada de la pedagogía sistémica y la gestalt, y en su caso, si fuera necesario coordinación con el centro escolar, resto de profesionales que estén trabajando con el/la menor, pediatra, etc.